nunca más se supo de ellos. Para la inmensa mayoría sólo hubo una víctima: Bayardo San Román. Suponían que los otros protagonistas de la tragedia habían cumplido con dignidad, y hasta con cierta grandeza, la parte de favor que la vida les tenía señalada. Santiago Nasar había expiadolainjuria,loshermanosVicariohabíanprobado su condición de hombres, y la hermana burlada estaba otra vez en posesión de su honor. El único que lo había perdido todo era Bayardo San Román.
CRO:085.19
EXPIAR - Cumplir el castigo correspondiente a un delito o una culpa