Cuando se marchó, cerrando la puerta con llave y dejandome sola en aquella tiniebla, me tumbé en el suelo con las piernas contra la puerta. Así permanecí, dando patadas y gritos, llamando a alguien que no podía ser sino tú. Al fin apareciste eintentasteenjugarmislágrimascontupañuelo. Pero no tenía: mis aullidos eran sólo de rabia. "Ahora me vas a contar por qué has hecho eso. ¿No te dabas cuenta del daño que podías hacerle a esa niña?" Me hablabas
SUR:015.25
ENJUGAR - Quitar la humedad a algo. Secar (normalmente, las lágrimas o el sudor)