dinero de esa procedencia debía ingresarse en una cuenta "especial", detalla la sentencia, de "masa abstracta", porque los depositantes no querían que las operaciones apareciesen registradas. El banco empleaba el saldo en distintas operaciones y liquidaba los correspondientes intereses a los clientes. Segúnprecisalasentencia,Cejudo, al recibir el dinero depositado por un cliente para efectuar tales adquisiciones, se lo entregaba a título de préstamo sin interés a Gómez Bretaña. En 1987, Orlando