que el reo aparezca como bestia. El furor del público contra el defensor no es tanto por su activa protección del reo cuanto porque su presencia junto a él impide sentirlo como bestia que pueda ser destruida mediante la desinfección. Lainstitucióndelabogadodefensoresloúnicoquepuedeasegurar que la justicia se siga pareciendo a la venganza y no adquiera el inhumano aspecto de la desinfección. Aun allí donde esta institución se hubiese reducido a pura hipocresía habría que defenderla, pues los lobos con pieles