funcionamiento, las que, en una palabra, esgrimen como incondicionada y absoluta la exigencia de poner bozal a la rabiosa bestia de la eficacia a ultranza, aún erigida en sumo y hasta único criterio para el éxito popular de una gestión. EnunodesustípicoschispazosdelucidezadvertíaAntonioGramsci (que fue, tal vez, junto con Rosa Luxemburgo, la más despierta de entre aquellas pocas mentes críticas y vivas que pudo dar el comunismo antes de abominar y proscribir para siempre de sus filas la funesta manía de