Texto contextualizado: |
con su corte de gesticulaciones, es el prosit con que se apura y saborea el enérgico y vigorizan elixir del escándalo. Es natural que quien hace su bondad de la maldad ajena sienta una auténtica ola de fruición a la noticia de una nueva infamia, que no viene sino a adornar con un destello más la aureola de su propia santidad. El fariseo es un bueno cuyas acciones suben cuanto más bajan las de ese eterno otro puesto enfrente por correlato necesario de su propio ser. Su bondad es un globo que se hincha y magnifica con el |
RAT:037.26 |