suaves caricias en la mejilla. Era la abuela, que, vestida ya para salir, le indicaba con un dedo en los labios que no hiciera ruido. Parecía alegre, sonreía con un guiño de complicidad. «Te he traído unregalo»,susurró,yMiguelseincorporódeun salto, qué era lo que le había traído. Calma, calma, le iba a gustar mucho pero tenía que dejarla buscar en el bolso. «¡Ya lo tengo!», exclamó
TER:043.10
INCORPORARI - Levantar o erguir la parte superior del cuerpo